El agrimensor Adolfo Sourdeaux era profundamente
religioso y católico, en consecuencia no descuidó
ese aspecto de la vida comunitaria. Tras gestiones realizadas
ante las autoridades de la Iglesia, el 23 de marzo de 1875 obtuvo
licencia para hacer funcionar en su quinta "El Retiro"
de Bella Vista, un oratorio público consagrado al Patriarca
San José, donde oficiaba misa un sacerdote que se trasladaba
de Moreno.
En 1876 don José Lucas Ocampo realizó
gestiones ante la Curia para erigir a su costa, una capilla pública
en la esquina de las actuales calles Belgrano y León Gallardo
de San Miguel. El 3 de agosto de 1878, el Arzobispo de La Plata,
Federico Aneiros, concedió licencia y se levantó
un pequeño edificio, humilde, pintado de blanco, con piso
de baldosas rojas, en cuyo frente un campanario con dos campanas
de desigual tamaño, llamaron por largos años a la
vida religiosa de la naciente población.
Una pequeña imagen de San Miguel Arcángel,
tallada en madera -donada por el párroco de Moreno, presbítero
Benito Pazos -presidió durante la existencia del templo,
su altar mayor-. El 8 de mayo de 1881 tuvieron lugar fastuosos
festejos inaugurales. los que fueron presididos por el Arzobispo
Aneiros y por el presidente de la Municipalidad de Moreno, don
Carlos Herrero.
El 18 de julio de 1889, el Arzobispo Monseñor
Federico Aneiros, erigió la Parroquia de San Miguel, con
los límites del pueblo.
Las dos localidades, San Miguel y Bella Vista,
empezaban a tener una creciente personalidad y las calles polvorientas
y llenas de árboles, daban una singular fisonomía
a la obra del fundador. Las calles se fueron demarcando con el
arado, mientras se levantaban modestas casas en las manzanas centrales.
|